Estimado empresario, ¿pagas por tiempo o por resultados?
Por naturaleza, la mayoría de las personas tenemos una tendencia a quedarnos cómodos en el entorno que ya conocemos. Después del impulso inicial cuando uno de tus colaboradores se incorpora a tu empresa, su motivación tiende a estancarse, y solo la mueves temporalmente si le aumentas el sueldo.
Sin embargo, subir el sueldo por sí solo no es la respuesta para mejorar los resultados y hacer que tu empresa sea competitiva.
¿No te gustaría saber el valor monetario que representa el resultado correcto de las actividades en tu empresa? Y no me refiero únicamente a las actividades de ventas.
Si los resultados de un proceso representan un valor de $10,000 dólares, ¿estarías dispuesto a repartir $2,000 dólares entre los colaboradores que contribuyeron a lograr ese resultado?
¿No preferirías compartir las ganancias a cambio de mantener la motivación y alcanzar el mismo resultado constantemente?
Existe una idea arraigada en la mente de los emprendedores y empresarios, pero tengo que decirte que ¡esa idea es incorrecta!
Es tu responsabilidad planear dónde quieres llevar a tu empresa y luego colocar las piezas correctas que allanarán el camino hacia la meta.
Hoy te revelaré la estrategia adecuada para que dejes de pagar por tiempo y comiences a pagar por resultados.
Olvídate del enfoque en departamentos; es anticuado y no produce resultados. Necesitas adoptar un enfoque basado en procesos.
- Define el rumbo que deseas para tu empresa, incluyendo metas a corto, mediano y largo plazo.
- Identifica cada uno de los procesos que hacen funcionar tu empresa.
- Define los resultados que debe proporcionar cada proceso; estos resultados deben contribuir al objetivo global: ¡el crecimiento de tu empresa!
- Determina cómo medir los resultados de cada proceso y con qué frecuencia.
- Establece el valor que representa cada uno de esos resultados para la empresa.
- Define las actividades necesarias en cada proceso para obtener siempre el resultado deseado e identifica las herramientas que se utilizarán para lograrlo.
- Identifica los recursos que debes asignar para alcanzar los resultados.
- Determina las competencias que deben tener las personas encargadas de ejecutar las actividades y contrata en consecuencia, teniendo en cuenta las herramientas que usarán y los recursos que administrarán.
- Ofrece un incentivo económico a tus colaboradores si alcanzan los resultados de sus procesos; la cantidad debe estar relacionada con el valor que representan dichos resultados.
El enfoque en procesos es fundamental, ya que te permitirá identificar el valor de los resultados en cada proceso, y, por lo tanto, sabrás cuánto ofrecer a tus colaboradores para que los alcancen.
Deja de pagar por tiempo y, en su lugar, invierte en estimular el compromiso de tus colaboradores. ¡Tu empresa te lo agradecerá!